Fue en 1967 cuando Klopman introdujo el concepto de tejidos para vestuario laboral con un 65 % poliéster y un 35 % de algodón en Europa. Desde entonces, y ubicada en su sede central en Frosinone (Italia), la empresa ha seguido creciendo hasta convertirse en el principal fabricante europeo de tejidos especiales para los mercados de prendas protectoras, corporativas y laborales.